Sobre mí
Familia, el pilar de mi vida
La familia es para mí lo más íntimo, lo que más amas, aquel círculo por los que darías tu vida. Mi familia es el proyecto más importante de mi vida y el pilar de la misma.
Mi familia
Estoy casado con Cristina Cortada, a quien conocí en el Hospital de Sant Pau hace más de 40 años. Sin su apoyo constante, consejo, paciencia, bondad, comprensión y, en especial, respeto, yo no habría alcanzado mis objetivos. Es la inteligencia y la sabiduría en la discreción. Ella es mi diez, siempre a mi lado en los momentos buenos y, muy especialmente, en los malos. Juntos hemos tenido tres hijos: Gabriel, Alex y Paola. Ellos, junto a Catiana y Alberto, nos han dado cuatro nietos: Clara, Gaby, Mía y Simón. Sin duda, todos ellos son el pilar y lo más importante de mi vida.
Mis orígenes emprendedores:
mi abuela y mi madre
Mi abuela, Carmen Mir, nació en Manresa en 1907 en el seno de una familia ligada al sector textil catalán. Su padre, mi bisabuelo Gabriel Mir, era un pequeño empresario textil y mi abuela creció entre telares y tejidos. Este entorno la condicionó de tal forma que decidió dedicarse al mundo de la modistería y así nació “Carmen Mir”, una firma de alta costura que llegaría de la mano de mi abuela a las más altas cotas del mundo del diseño y la moda en España, convirtiéndose en una de las pioneras de esta industria en nuestro país.
En el back office estaba mi abuelo, Buenaventura Masfurroll, y más tarde mi padre, Gabriel Masfurroll Mir.
Carmen Mir fue una gran mujer, igual que mi madre. Ambas, en las décadas de los 60 y 70 fueron ya importantísimas emprendedoras y empresarias. Viajaron por medio mundo, exportaron a varios países y vendieron sus modelos a Saks y Bergdorf Goodman de New York, y también en los Ángeles y Houston. Elisa Lacambra, mi madre, trabajó codo con codo con mi abuela durante 40 años, compartiendo ideas, bocetos y propuestas de diseño, y sucedió a mi abuela en el negocio familiar compaginándolo durante los últimos años dando clases en el Instituto Feli de alta costura.
Podéis conocerlas más en detalle aquí:
Mi educación
La educación infantil que recibí en la Escola Thalita y en la Escola Costa i Llobera de Barcelona fueron las bases de mi futura carrera académica y profesional. Ambas, en plena dictadura española, apostaron por una pedagogía renovadora con la voluntad de educar a personas libres, racionalmente críticas y comprometidas. Allí tuve la suerte de tener como profesores a Teresa Codina, fundadora y directora de la Thalita, Pere Dauder, cofundador y primer director de la Costa i Llobera, y Pilar Benejam, con quienes he mantenido contacto a lo largo de mi vida. Además, fue en estos centros donde desarrollé mi pasión por la lectura y la escritura, pero también donde empecé mi carrera deportiva en la natación.
Mi biografía
En este apartado encontraréis un resumen de mi trayectoria profesional, mi contribución en el ámbito del deporte y las instituciones filantrópicas, mi aportación en el mundo del emprendimiento y la formación, así como el camino recorrido como escritor, conferenciante y colaborador en diversos medios de comunicación. Un reflejo de mi inquietud por conocer y de mis ganas de aprender y transmitir lo aprendido.
Reconocimientos
Estoy muy orgulloso de haber recibido estos reconocimientos que os detallo, a la vez que agradecido a todos los que me han acompañado en el camino y con quien quiero compartirlos.
Lo que opinan de mí...
Gabriel Masfurroll fue alumno mío en la escuela Costa i Llobera en los cursos de Geografía de primero y segundo de bachillerato elemental. No recuerdo exactamente las fechas pero debía de ser entre 1964-66, año más o menos.
Cossio dice “De los alumnos nacen los maestros” y yo aprendí a ser maestra trabajando con mis alumnos. Gabriel disfrutaba en mi clase y yo, sólo mirándole, cogía seguridad y ganas de estar a la altura de su interés y de todos los alumnos. Gabriel siempre recuerda que en clase siempre trabajábamos el “¿Por qué?” de los hechos y problemas procurando aprender a pensar de forma cuerda, procurando descubrir que aprender es muy interesante.
Gabriel ha seguido aprendiendo toda la vida. Es una buena persona. Comprometida con la familia y con la sociedad. Ha hecho un buen trabajo en el campo de la sanidad, en la universidad, en la cultura… Yo siempre le he recordado como uno de los alumnos que me enseñó a ser maestra.
Gabriel es la excelencia del ser humano en acción con valores familiares y de amistad únicos. Su aportación es de efecto multiplicador en muchos sentidos, me gustaría resaltar sobre todo su faceta de mentor tratando de abrir puertas a las nuevas generaciones ofreciendo consejos y experiencia de vida al tiempo que su compromiso indiscutible con la diversidad.
Gabriel Masfurroll es un maestro del optimismo que ha conseguido redefinir la idea de felicidad y proyectarla en todo aquello que hace. Su humanismo ha creado escuela, capaz de combatir estereotipos y elogiar la singularidad. Masfurroll promueve la audacia, la inclusividad y el mestizaje como valores fundamentales en la empresa.
Aunque somos parientes, a pesar de que nuestro apellido no sea idéntico, conocí a Gabriel Masfurroll hace pocos años. Los dos experimentamos una gran sorpresa al descubrir nuestro parentesco procedente de Gironella. Yo, además, he tenido la inmensa satisfacción de descubrir a la vez a una persona excepcional, poliédrica, familiar y comprometida con su entorno, preocupada por los muchos dilemas a los que se enfrenta nuestra sociedad y volcada en mantener activo el espíritu noble del deporte y de la solidaridad. Basta con decirle a Gabriel que necesitas ayuda para que él se desviva para proporcionártela. ¿De cuántas personas podríamos decir lo mismo?
Hace muchos años que te conozco, Gabi. Nos unió y nos sigue uniendo Alex, tu hijo. Siempre has estado cerca de Aura y dispuesto a ayudar. Gracias a ti, muchas personas con discapacidad son trabajadores y les ha cambiado la vida. ¡Seguimos contando contigo, Gabi, nos hace mucha falta!
Amigo leal y generoso, familiar, ciudadano comprometido pleno de valores, empresario y profesional de referencia allí donde lo ha intentado, por su pasión, liderazgo y bonhomía. Pionero en tantas cosas, siempre dispuesto a aprender y a compartir lo aprendido. Y hasta en su imperfección (preferencias deportivas) protagonista de divertidas y apasionadas polémicas que atesoro con enorme cariño.
A los 4 años comienza en la escuela Talitha. Enseguida se siente cómodo: sin problemas de aprendizaje y con mucha iniciativa. Conecta con el compañero D. LL.: un par de “espatotxins” (personas con mucho ingenio). No pierden ocasión para hacer de las suyas. Travesuras espontáneas primero y preparadas cuando se sienten seguros. No les cuesta reconocer lo que han hecho.
Querido Gabi, desde hace muchos años, mantenemos una buena amistad. Nuestro aprecio a ti y a tu familia creo que se produjo por el fútbol (cuántos amigos hemos hecho con nuestro deporte favorito) uno del Barça y otro del Real Madrid. Si a esto añadimos que cada uno de nosotros hemos tenido unos chicos que han sido y son nuestros amores para toda la vida, esta unión es más grande. Te animo a que publiques tus reflexiones en esta página web que seguro llevará muchas experiencias, mucho conocimiento y, sobre todo, mucho sentido común. Un fuerte abrazo, amigo.
Gaby Masfurroll, querido amigo de juventud dentro y fuera de las piscinas, ya mostraba por aquel entonces una inquietud por mejorar la sociedad en la que tocaría vivir. Hay que decir que ha salido exitoso de todo lo que se ha propuesto tanto profesional como humanísticamente.
Para mí es Gaby… deportista, empresario, hombre de familia, mentor y mucho, mucho más. Para mí es Gaby… leal, sincero, fuerte, capaz, humilde, soñador. Para mí es Gaby… mi amigo, mi hermano.
Lo conocí siendo yo muy pequeño como referente del deporte que yo practicaba, el waterpolo.
Le admiré cuando fui siguiendo su trayectoria profesional. Yo he intentado humildemente aplicar mucho de su manera de gestionar e inventar en mi trabajo en la sanidad de Manresa.
Pero, sobre todo, es un referente de vida; por su familia, por su hijo Alex, por lo que hace todos los días, cada hora y cada minuto de su existencia.
ES ILUSIÓN, TRABAJO, VIDA Y AMOR.
Gaby es apasionado, vive la vida momento a momento con intensidad. Cálido, comprometido, capaz de llevar a cabo sus ideales… despierto, emprendedor, buen comunicador, alegre y optimista. Contagia su entusiasmo a todo el que se cruza en su camino.
En mi recuerdo Gaby siempre aparece con una radiante sonrisa.
Amigo Gabi,
Pocas personas conozco que amen todo lo que hacen como tú lo haces. La familia, tu profesión, el deporte. Siempre con pasión, humildad y determinación.
El deporte te debe mucho, pero nunca has querido nada a cambio. Lo has amado, y lo seguirás haciendo, con mucha generosidad.
Te admiro.
Dicen que a las personas se las conoce viajando, he tenido la oportunidad de conocer a Gaby en múltiples viajes del “Grupo Harvard”, organizados por nuestro amigo común Pedro Nueno.
Gaby es una persona irrepetible, inquieta, inteligente, apasionada, emprendedora, innovadora, familiar, amiga de sus amigos y solidaria. Su afán por aportar le ha llevado a esta iniciativa de compartir lo aprendido.
Bravo, Gaby!!!
Fue un momento muy bonito y entrañable por el cual Gaby y yo nos conocimos personalmente. El gran homenaje que le hizo el Círculo Orellana a su madre, en el Instituto Cervantes en Madrid. Desde ahí hasta hoy, otros muchos encuentros y colaboraciones importantes nos mantienen unidos. Gaby es un ser extraordinario, humanista, un hombre muy evolucionado y de gran visión, con trato y formas exquisitas. Pero lo que más destacaría de él es su HUMILDAD, en mayúsculas.
Carácter positivo incluso en las peores circunstancias, espíritu emprendedor, curiosidad inagotable, mirada abierta sobre las cosas y las personas, capaz de convertir las dificultades en energía constructiva… Así es el Gabriel Masfurroll que conocí en el FC Barcelona y con el que años después conservo una sincera amistad.
Mi querido GABRIEL es pasión, familia, bondad, amistad, solidaridad, humor y una persona a la que vale la pena tener cerca. Para mí GABRIEL es inimitable.
Para mí, para nosotros, los del proyecto Hockey+, hablar de Gabriel Masfurroll es hablar de generosidad y complicidad, sensibilidad y compromiso con las personas con discapacidad. Una persona llena de energía y pasión que ha sido un eslabón clave para ir construyendo, entre todos, un mundo más justo y más respetuoso con la diversidad.
Gabriel es, por encima de todo, empático, generoso y tremendamente humanista. Destaca también por su simpatía y carácter alegre y siempre es un placer conversar con él porque su discurso rezuma optimismo y emana positivismo.
Conocí a Gabriel en 2009. Presentaba su libro “Cartas a Alex”. Mi hijo con síndrome de Down tenía apenas 1 año. Tras leer el libro, le escribí un mail, sin esperar nunca respuesta; pero en contra de mis expectativas, ahí estaba la respuesta de un señor con millones de cosas mejores que hacer que contestar a una madre novata en lo que a diversidad se refiere.
Desde entonces nunca ha dejado de sorprenderme su talante tan cercano y su capacidad de darse a los demás. Me alegro enormemente de que el síndrome de Down se haya cruzado en mi vida para poder conocer gente tan maravillosa como Gabriel.
A unique man with incredible emotional intelligence, open mindedness, generosity and a multidimensinal nature with a variety of inspiring aspects… The empathy of a leader thanks to his vulnerability which he was able to transform into a strength.
Generosidad, actitud y valores. Coherencia, valentía y con una sensibilidad excepcional. Un excelente empresario, sin perder su sencillez. Gaby es un gran ejemplo para los que tenemos la suerte de conocerle. Es de aquellos que cuando se cruzan en tu camino, quieres que no pasen de largo, que se queden y poder compartir y contar con ellos.
Doy gracias a Dios por haber puesto en mi camino como profesional a Gabriel Masfurroll. Me hace sentir parte de la familia de la Fundación Alex y de Clínicas Mi, con el gran cariño y la alegría que me transmite, me ayuda a sentirme valorado y a confiar en mí mismo.
Gabriel es una persona con grandes valores que destacó desde su incipiente juventud.
Amigo de sus amigos, entrega generosamente su sabiduría, trabajo y amor a quien más lo necesita.
Un gran hombre que ha desarrollado relevantes iniciativas demostrando la fortaleza que le transmite su familia, el motor de su vida.
La vida nos unió por casualidad y, rápidamente, conectamos. Compartimos la esencia de la vida, el latir de una sintonía que pretende hacer de este mundo un lugar mejor. Gaby forma parte del club de la buena gente, donde uno se comunica a través de las emociones, donde existen mil razones para sonreír al despertar, donde los problemas se relativizan por el bien común, donde amar es sinónimo de libertad.
Nos queda mucho por hacer. Amigo, cuando lo necesites, te ofrezco mis alas para volar.
Una vez alguien me dijo “amores vas a encontrar muchos, pero verdaderos amigos, muy pocos”. Es un orgullo poder contar con la amistad de Gaby, siempre presente en los momentos importantes, persona en la que puedes confiar y nunca defrauda. Gaby es generoso, solidario, siempre dispuesto a ayudar a los que más lo necesitan. Amigo, ¡eres digno de admiración!
Conocí a Gabriel cuando vivía en Barcelona. Una gran persona. Auténtico, inspirador y bondadoso. Disfruto leyendo sus publicaciones sobre el deporte y la vida. Lo admiro por todos sus proyectos y aportes a la humanidad, especialmente por el amor hacia su familia. Sé que siempre puedo contar con él.
*Por orden alfabético.